Caso Malaya: los cobros millonarios de Julián Muñoz

24 de julio de 2006 . El exalcalde de Marbella y pareja de la cantante Isabel Pantoja, Julián Muñoz, fue detenido el 17 de julio de 2006 en el marco de la ‘operación Malaya’ contra la corrupción en la Costa del Sol. Apenas una semana después, los españoles pudieron leer en ‘Tiempo’, gracias a un artículo de Manuel Rico, las pruebas que el juez tenía contra Muñoz. 

En el próximo informe sobre hacinamiento en las cárceles españolas es probable que la prisión malagueña de Alhaurín de la Torre aparezca en los primeros puestos. Al menos si el juez Miguel Ángel Torres continúa con su frenético ritmo de trabajo. Políticos, abogados y empresarios siguen llegando al centro penitenciario acusados de beneficiarse de la situación generalizada de corrupción en Marbella. Y por si faltaba alguien, el ingreso en prisión de Julián Muñoz, exalcalde marbellí y novio de la tonadillera Isabel Pantoja, ha completado un vecindario de tronío.

 

Julián Muñoz es un tipo de natural gracioso, pero en el patio de la cárcel coincidirá con gente que le tiene escasa simpatía. Por ejemplo Juan Antonio Roca, presunto cerebro de la trama de corrupción y que ha tenido una intensa relación con Muñoz. Durante más de una década trabajaron juntos a las órdenes de Jesús Gil, alcalde de Marbella entre 1991 y 2002, y luego siguieron colaborando cuando Muñoz se convirtió en regidor. Pero en el verano de 2003 el novio de Pantoja tuvo una idea que resultó nefasta para ambos: destituir a Roca como responsable de Urbanismo. Muñoz duró en la alcaldía el tiempo que Roca tardó en montarle una moción de censura. Unas pocas semanas.

 

Desde entonces se odian, pero el destino ha vuelto a ponerles en la misma institución. En este caso, penitenciaria. El juez Torres mantiene que hay suficientes pruebas para asegurar que, en 2002, Julián Muñoz obtuvo de forma ilícita más de 1,6 millones de euros: 150.000 en efectivo, y cerca de millón y medio a través de una permuta de terrenos con el Ayuntamiento. Así que lo mandó a prisión, como presunto autor de delitos de cohecho y malversación de caudales públicos.

 

Otros pagos. Pero una cosa es lo que el juez pueda demostrar, y otra lo que ha ocurrido realmente en Marbella. En el entorno más cercano a Roca cuentan jugosas andanzas. Por ejemplo, que Julián Muñoz “le entregó 400 millones de pesetas a su exmujer para taparle la boca. Y el dinero no salió precisamente de su bolsillo”. Mayte Zaldívar había montado en cólera cuando se enteró de que su exmarido, Julián Muñoz, era la nueva pareja sentimental de Isabel Pantoja. Y se dedicó a recorrer platós de televisión atacando sin piedad a los felices novios.

 

Otra ocasión en que Muñoz pidió ayuda económica a Roca fue para comprar un espacioso chalé en la zona. El banco no quería concederle la hipoteca por falta de garantías, y Roca se las ingenió “para conseguir un aval en efectivo que garantizase la devolución del préstamo”, explican las fuentes consultadas.

 

La Justicia también podría examinar con detenimiento las relaciones entre Muñoz y Tomás Olivo, el constructor que llamó a Roca para que fuese a Marbella a principios de los años noventa. Tras ser desalojado de la alcaldía, “Olivo le pagaba todos los meses 24.000 euros a Muñoz”, aseguran los amigos de Roca. ¿Y en concepto de qué? Llegados a ese punto prefieren guardar silencio. Pero las posibilidades no son muchas: o en cumplimiento de un pacto, o en pago por su silencio.

 

Un silencio que rompen a la hora de mostrar su desilusión con Tomás Olivo. Una persona que era “como un hermano” para Roca, que ganó muchísimo dinero gracias a las decisiones del Ayuntamiento de Marbella, y que ahora también hace mutis por el foro. “La familia tiene todas las cuentas bloqueadas, y necesita dinero para las necesidades diarias. Cuando la mujer de Roca se lo explicó a Tomás Olivo, este le respondió que no era un buen momento para mover dinero”, detallan fuentes próximas al exasesor urbanístico. El constructor también fue detenido en la operación Malaya, pero el juez lo puso en libertad bajo fianza de 500.000 euros. Un dinero que Olivo sí movió con facilidad.

 

Documentos. Las fuentes consultadas aseguran que Roca guarda a buen recaudo la documentación que prueba los cobros de Muñoz: “En contra de lo que afirmaron algunos medios, Roca jamás se planteó cantar ante la policía. Dice que ahora no toca, que hay que aguantar”.

 

Los próximos a Roca también culpan a Muñoz del robo de siete agendas que había en su despacho de Marbella: “Juan Antonio estaba de vacaciones en Mallorca, en el verano de 2003, y le llamaron para decirle que habían entrado en su oficina. Muñoz era alcalde y dijo que ya enviaba a personas de su confianza para ver qué pasaba. Mandó entre otros a su sobrino, y desaparecieron las agendas”. El sobrino es Alberto García Muñoz, que en aquel momento era concejal. Roca denunció el robo, pero aún no ha sido aclarado.

 

De las siete agendas, dos están en manos de la Justicia. Las otras cinco siguen perdidas. Pero el juez tiene gran interés en encontrarlas, al igual que dos zulos con documentación que está buscando. En Marbella corre el rumor de que Miguel Ángel Torres no se marcha de la ciudad hasta que aparezcan los zulos. Y como trabaja 14 horas al día, quizá tenga suerte.

Portada del 24 de julio de 2006